"No es una inocentada. Apocalipsis de manera recurrente. Aumenta el número de clientes nerviosos que me hace esta pregunta: ¿Hay una cruzada de los anglosajones contra Europa? Después de la violencia generada por el Brexit, que seguirá un curso lleno de sangre y de lágrimas y tras leer, entre líneas, los exabruptos del Premio Nobel de Economía Joseph Stiglitz (recuerden que estos grandes premios se han dado a otros de talante parecido, por ejemplo, en los Nobel de la paz) me entran muchas dudas, porque antes los ataque vinieron del área de Soros, el filántropo que izo saltar el Sistema Monetario Europeo por los aires. Cuando leo que la Justicia de EE.UU. pretendía ponerle una multa milmillonaria al desangrado Deutsche Bank (DE:DBKGn) y, con ello, desestabilizar los mercados europeos, se me ponen los pelos como escarpias. Hay miedo a la deriva del Brexit, miedo a los populismos, miedo al día después de las elecciones de EE.UU. y, como siempre, miedo al miedo. En los más de 40 años que llevo metido en este fregado, en el mundo de la Bolsa, ha vivido de todo: las penurias de la crisis del petróleo; la euforia compradora de acciones españolas tras la llegada de los socialistas al poder; el primer crash de mi vida, el de 1987; el acoso y derribo de la libra por Soros y más tarde el efecto dominó sobre el enterrado Sistema Monetario Europeo; la entrada de España en la OTAN; las Olimpiadas; el efecto tango, tequila y demás; la fiebre amarilla; la crisis rusa por el mal hacer de un hedge fund de EE.UU. capitaneado por prohombres de las finanzas de la primera potencia del mundo; la llegada del euro y, mucho más, hasta llegar al Imperio de las Máquinas, que son las que mueven los mercados..."
"Sí, clientes muy nerviosos, máxime cuando leen análisis escritos en lacartadelabolsa como el de Carlos Montero hace unas semanas: el Gurú que pronosticó el Brexit espera que el euro se rompa en 5 años".
Jim Mellon destacó entre los inversores en 2016 como un raro espécimen, pronosticando la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea. Ahora, el presidente del Grupo Burnbrae prevé otra ruptura. Mellon predice que el euro se convertirá en la futura víctima de una creciente marea anti-establishment causando que la unión monetaria se desmorone en los próximos cinco años.
"El Brexit va a ser un espectáculo secundario ante los problemas a los que se enfrentará Europa, que se están volviendo más y más evidentes", dijo Mellon. "El euro tal como está en este momento es un mecanismo muy inapropiado - le doy al euro entre uno y cinco años de vida".
El referéndum de Estados Unidos y la victoria de Donald Trump en las elecciones estadounidenses de este mes, señalaron el ascenso del populismo en todo el mundo. Ahora hay una creciente especulación de que el referéndum de Italia en diciembre, y las elecciones en Francia en 2017, puedan dar lugar a más trastornos políticos en Europa, haciendo que algunos inversores cuestionen el futuro del euro. Dicho esto, predecir la desaparición de la moneda única no es un fenómeno nuevo - en 2014 Citigroup (NYSE:C) dijo que había un 90 por ciento de posibilidades de que Grecia abandonara el bloque, una sugerencia que los analistas retiraron este año.
El euro cotiza en torno a 1,065 dólares después de tocar los 1,0518 la semana pasada, el nivel más bajo desde marzo de 2015. Mellon espera que la moneda caiga por debajo de la paridad "en algún momento durante el próximo año", aunque no está vendiendo activamente la moneda debido a la posibilidad de un rebote a corto plazo.
Sin embargo, con el referéndum italiano del 4 de diciembre acercándose, Mellon está vendiendo los bonos del gobierno del país. El rendimiento italiano a 10 años subió al 2,23 por ciento el 14 de noviembre, la cota más alta desde julio de 2015, pero sigue por debajo de su promedio de cinco años del 3,24 por ciento. Además del inminente referéndum, los bonos se han visto perjudicados por una venta global en los activos de renta fija que ha permitido que los rendimientos en todo el mundo suban desde niveles mínimos récord.
"He sido un gran vendedor de bonos del gobierno este año, en cualquier lugar básicamente, pero mi favoritos son los bonos italianos", dijo Mellon. "Todo el mundo que participa en este estúpido mercado de bonos debe saber que hay un riesgo de duración grave".
Mellon dijo que "tuvo un buen día" después de la votación del Brexit y ha conseguido una rentabilidad de casi el 25 por ciento este año, pero se negó a proporcionar más detalles de sus movimientos. Antes de la votación sobre la pertenencia a la UE dijo que la libra podría caer a un mínimo de 1,32 dólares si había un Brexit. La moneda cayó a un mínimo de $1.1841 el mes pasado, y ahora se encuentra en $1,25.
Cinco meses después de Brexit, la perspectiva de la libra esterlina sigue siendo "bastante buena" y "las preocupaciones sobre que el cielo se desploma no se están materializando", según Mellon.
"Tienes que negociar en ambos sentidos, no puedes simplemente decir que voy a ser un vendedor, también tienes que ser un comprador", dijo.